La amiga de mamá es una señora muy ardiente

La vida le peso muy rápido y en un momento, se encontró recordando las cosas que hizo y lo divertido que fueron. Era esa sensación de que la mejor de todo había pasado y que en lo adelante, nada de lo que hiciera iba a poder superar esos momentos. Luego entendió que la vida sigue y puede seguir escribiendo su historia. Además, le favorece que a sus 60 años todavía le gustan las folladas fuertes. Y eso la pone en una posición favorable para ella, ya que los chavales adoran una zorra que no le importa que le destrocen el coño mientras la están follando.