El reencuentro de un hijo abandonado con su madre

Si a vosotras os viene vuestro nieto de 25 años diciéndoos que nunca hasta hoy ha visto una teta, ¿qué haríais?. A mi no se me ocurrió otra cosa que darle su primera experiencia sexual a pesar de tratarse del hijo de mi propia hija. Le enseñé su primer par de tetas, le permití tocarlas, sobarlas y chuparlas y además le metí un polvo que no olvidará en toda su vida. Siempre podrá decir a sus amigos que perdió su virginidad de manos de su abuela.