Corrida en la boca de mi suegra

Esta mujer ya contaba con 73 años, pero su cara de viciosa y sus dos enormes tetas daban a entender que todavía tenía mucho que ofrecer en el sexo. Quería hacérselo con un hombre negro, a poder ser joven y con buena polla, y por fin lo consiguió. Se notaba que realmente la zorra estaba muy contenta por el hecho de poder hacérselo con él.
Comenzaron a desnudarse y la anciana pronto empezó a jugar con un dildo metiéndoselo en su coño ante la mirada de sorpresa del chico. Después se comió toda su polla y se preparó para que la penetrase, algo que la zorra esperaba ansiosa. Tenía un culo bastante grande y el negro quería follársela a cuatro patas, cosa que hizo hasta que finalmente acabó corriéndose. La anciana no podía parar de sonreir, estaba realmente contenta y satisfecha. Tras correrse el negro ella siguió comiéndose toda su polla disfrutando hasta el último segundo.