Vieja gorda se folla a un feo y flacucho jovencito

Su madrastra quería ejercer de buena madre, por lo que mientras el chico estaba enfermo ella cuidaba de él. Estaba dormido cuando le llevó algo de desayunar, y eso por alguna razón hizo que la puta se pusiera cachonda. Se acercó a él, le tocó y agarró su mano para llevársela hasta sus braguitas.
El chico no estaba tan enfermo como parecía, ya que al sentir aquello se despertó y le metió los dedos en su vagina, sin duda era más de lo que ella esperaba. No tardó la puta en ir a comerle la polla, los dos estaban muy cachondos. Después la cosa se aceleró y su hijastro la penetró follándosela como a una puta cualquiera hasta que acabó eyaculando sobre ella.