Le indica a la madurita lo que tiene que hacer

Su evidente sobrepeso y el hecho de que fuera su madre no iban a ser problema, al menos para ella. La mujer estaba muy caliente y tenía como objetivo a su hijo, algo que las maduras rusas no suelen despreciar. Quería sentirse sexy, y sabía que su hijo era el mejor para que se lo demostrara. Tras estar sobre él un buen rato comenzó a besarle, él le devolvió los besos. De repente se levantó, se quitó la ropa y le mostró su enorme culo y un dildo que llevaba dentro la puta. El muchacho estaba alucinando, pero había conseguido ponerle caliente. Empezó a tocar sus grandes nalgas y a lamerlas, la mujer se había percatado de que estaba caliente, una madre sabe esas cosas.
Comenzó a chuparle la verga y luego se puso a cuatro patas para que se la follara, el chico lo hizo sin pensárselo. Al final se la metió hasta por el culo, algo que sin duda le gustaba a la puta. Acabó abierta de piernas mientras el chico acababa dentro de ella, luego jugó de nuevo con su dildo anal.