Doble penetración con dos de sus sobrinos favoritos

Acostado en su cama, piensa en cómo sería el mundo si las personas profesaran más amor. El mundo necesita de buena vibra y que las personas se dejen de juzgar entre sí para poder llevarnos mejor. Eso acabaría con todas las guerras. Son parte de los pensamientos que tiene cuando de pronto, su abuela le empieza a chupar la polla y él tiene que dejar que lo haga. Ya que tiene que practicar lo profesa y no dejara que la anciana se quede con las ganas de follar. Su coño necesita una follada y él, siendo su nieto, es el indicado para hacerla feliz. No va a esperar que otro lo haga.