cariño, ¿fabricamos un hijo?

Ella tenía algo con lo que la mayoría de las mujeres sueña, unas tetas enormes. Ese hombre iba a ser el afortunado que las probaría en esa ocasión, por lo que se sentó a su lado y comenzó a tocárselas. Luego le hizo algo que solo las tetonas pueden hacer, una buena paja rusa o cubana. Luego la zorra le comió la polla justo antes de que se la metiera en su coño, ella se puso encima y se movía como una buena veterana. No solo follaba en cualquier posición, sino que además se le daban bien todas ellas. Luego se puso a cuatro patas para disfrutar de ese bonito culo que tenía la guarra, y cuando vio que iba a correrse le dijo que pusiera las tetas para echárselo todo ahí.