Su anciana madre tenía claro lo que quería

La verdad es que las consolas y los videojuegos nos dan muy buenos momentos pero nada como una buena mamada de verga. Mientras este tipo juega a su juego preferido se olvida de todo y eso a su hermanastra le da mucha rabia porque es de las que les gusta que siempre estén pendientes de ella. Para llamar la atención siempre hace lo mismo y es tumbarse en las piernas de su hermanastro mayor simulando que está cansada y quiere echar una cabezadita. Ni mucho menos, esa puta lo que quiere es comerse ese rico trozo de carne y acabar bebiéndose un buen chorro de leche caliente.