Hoy te voy a enseñar a follar con una mujer

Le costó, vaya si le costó, pero al final la cachonda de mi abuela acabó completamente desnuda tumbada en la cocina abierta de piernas para que yo entrase dentro de ella a placer. De siempre he sabido que era una mujer especial, pero sobre todo muy zorra porque mi abuelo siempre se estaba quejando de que hablaba con muchos hombres. Aun así el pobre viejo ha aguantado a su lado y ahora lo comprendo todo porque no veas cómo folla la cabrona. 71 años tiene mi abuela y ya quisiera mi mujer tener sexo la mitad de bien que lo tiene la anciana.