Esta milf sería el sueño de cualquier chico joven como él, con tan solo 19 años estaba a punto de vivir unas de esas experiencias inolvidables. Se la encontraron en el supermercado dos amigos y ella les hizo el favor de comprarles algunas botellas de alcohol. Pero a cambio ella les dijo que la acompañasen a casa, por supuesto los chicos fueron. Una vez allí uno de los dos comentó que tenía que irse, por lo que aquella milf y el joven se quedaron a solas. Ella le dijo si quería beber un trago y se lo llevó a su cama.
Pero él no podía dejar de mirarla, que buena estaba la zorra. Por supuesto si ambos estaban ahí era solo para una cosa, para follar, y era algo que tenían claro. Por tanto la madurita no quería perder el tiempo y por eso mismo se comenzó a desnudar. El muchacho al verla no pudo contenerse e hizo lo mismo.
Ella primero le comió la polla mientras ambos estaban ya en pelotas, poco después la penetró y se la folló en posturas inimaginables para muchos tíos. Por eso mismo ella los prefería jóvenes, porque sabía que follaban mejor que cualquier maduro.