A la abuela aun le gustaban las pollas

Este tío trabaja en su casa y como suele ser normal con este tipo de trabajos al final echas muchas más horas que si estuvieras en una oficina. Por eso se recomienda hacer varias pausas para andar, comer o simplemente salir al balcón para tomar aire. En su caso no hace nada de eso porque el hijo de puta tiene un pedazo de chollo en casa, es decir, una niñera siempre lista para abrirse de piernas y aliviar su ansiedad, ya nos entendéis… Esa golfa está como un puto tren y tiene el típico cuerpazo latino que hace babear a cualquier hombre.