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Muchas son las maduritas a las que les encantan los chicos jóvenes, como por ejemplo el español Jordi. La mujer tenía 38 años mientras el chico contaba con 18, lo cierto es que impresiona verlos juntos por la diferencia de edad. Pero a ellos en realidad no les importa demasiado, más bien al contrario, les daba morbo. Al igual que las maduras se sienten atraidas por los chicos jóvenes, ellos las prefieren más mayores. Tras presentarse y hablar un poco comienzan a desnudarse. Ella le demuestra su experiencia comiéndole la polla, y al quedarse sin ropa le muestra sus grandes tetas.
Por otro lado Jordi a pesar de ser delgado, joven y bajito, la sorprende con una buena polla. De hecho por algo lo suelen llamar «el niño polla», no es para menos. Le pega una buena follada demostrando que a veces la mejor combinación es que haya precisamente una buena diferencia de edad.